CABA
#VolvioInfonews: periodismo cooperativo y sin patrón
Unos 30 trabajadores del portal de noticias que el grupo de Sergio Szpolski y Matías Garfunkel habían llevado a su extinción, formaron una cooperativa para mantener las fuentes de trabajo. Las dudas y los desafíos. La perspectiva de trabajar de forma autogestiva. La amenaza de desalojo. La autogestión frente al abismo del desempleo.
Con un hijo de 5 años y un alquiler a cuestas, Virginia Quiroga dice que pasó por todos los estados: angustia, bronca, rebeldía. “Conmigo no van a poder”, pensaba, cuando los empresarios Sergio Szpolski y Matías Garfunkel, dueños del Grupo 23, dejaron de pagar los salarios de las trabajadoras y los trabajadores del portal de noticias Infonews, y los rumores sobre el cierre del último de los medios del grupo comenzaban a instalarse en los pasillos. Ya había pasado el conflicto con el canal de noticias CN23, con Radio América, con los diarios El Argentino y Tiempo Argentino, cuando la peor primicia.
“Hoy nos toca dar la noticia más triste: cierra Infonews”, fue el tweet de la cuenta oficial del portal a las 16:36 del 2 de mayo. Tuvo más de mil retweets, abrazos virtuales y condena pública a los empresarios que, esta vez, habían dejado más de 50 trabajadores en la calle.
“Fueron momentos muy feos”, dice Quiroga a lavaca. “Que de un día para el otro no nos paguen el sueldo es una demostración de que no te lo quieren dar. Hubo una intención clarísima de dejarnos a todos en la calle, porque a mí no me van a decir que alguien que cobró millonadas por pauta oficial no tiene plata. La pasamos realmente mal” dice en referencia a los casi 815 millones de pesos con los que el grupo fue, lejos, el que mayor pauta publicitaria cobró durante la gestión kirchnerista.
Por eso en los últimos días se hizo viral un nuevo tweet en cuestión de minutos, con una foto y un hashtag que lo decía todo: “#VolvioInfonews. Periodismo cooperativo”.
Los trabajadores habían optado por la autogestión.
La pauta de la deuda
El lunes fue el debut de Infonews cooperativo. “Nosotros fuimos el último medio que quedó en propiedad de Szpolski y Garfunkel”, relata Gustavo Streger, director periodístico. “De los 800 trabajadores del Grupo que quedamos en la calle, con Tiempo y Radio América vendidos a Martínez Rojas, con CN23 y El Argentino entregados en un trueque accionario polémico, con otros medios como Rock and Pop y Splendid vendidos al Grupo Fénix, quedamos nosotros. Hubo negociaciones durante meses con Szpolski para llegar a una indemnización, pero el día que teníamos que firmar el acta acuerdo en el Ministerio de Trabajo dijo que no tenía plata”.
Dato: durante el período julio 2009 y junio 2015, el Grupo 23 recibió al menos 814,9 millones de pesos en concepto de pauta oficial. Marina Giacometti, secciones sociedad y política, una de las delegadas: “Estábamos negociando los retiros voluntarios. Hasta habíamos llegado a una cifra. Fue mucho tiempo de esperar algo que, finalmente, no pasó”.
Streger: “Dejó de pagar los servidores y en mayo se cayó la página. Nosotros dejamos de cobrar en febrero. Enero y febrero ya lo habíamos cobrado en cuotas. No sacamos la cuenta en plata, pero calculamos una cifra millonaria: son sueldos e indemnizaciones de 50 personas, muchas con años dentro de la empresa”.
Las deudas también alcanzaron a los dueños del inmueble cuando la empresa generó un pasivo de seis meses por no pagar el alquiler. Streger explica que los propietarios del local iniciaron hace dos meses un juicio de desalojo por esa deuda. La causa se tramita en el Juzgado Civil y Comercial 63, donde abogados del Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SiPreBA) presentaron un amparo para que se entienda cuál es la situación de quienes trabajan en el portal. En un comunicado (https://www.infonews.com/nota/300346/no-al-desalojo-de-la-redaccion-de-infonews), explican que ese recurso fue elevado a la Cámara Civil de Apelaciones, que tiene en su poder la decisión de darle lugar o dictar el desalojo.
“No queda más que esperar”, dice Pablo Albornoz, editor, hoy presidente de la cooperativa. “Creemos que ya fuimos abandonados por la empresa, por el Estado, presentamos denuncias por las irregularidades, la empresa no se presenta y el Ministerio dice que no puede solucionar nada porque la empresa no va. Si el Estado no puede solucionarlo, entonces quién. En ese contexto nos llega la orden de desalojo. Es una deuda reclamada, de la misma manera que nos debe plata a nosotros. Pero la deuda es con la empresa, no con los trabajadores”.
La idea
En medio de esa crisis comenzó a gestarse la idea de la cooperativa. Mucho tuvo que ver la experiencia de las trabajadoras y trabajadores de Tiempo Argentino, que en marzo se lanzaron con su primera edición autogestiva. Albornoz: “Nos vimos reflejados en ellos”.
Streger: “Tenemos gente que no pudo reinsertarse, sobre todo en el contexto de destrucción de puestos de trabajo de prensa que hubo en los últimos meses. Además hay una empatía en el grupo propia de compañeros que venimos laburando hace 8 años, creyendo en un proyecto, haciéndolo crecer. Nosotros hicimos Infonews, lo diseñamos, hicimos las notas, por lo que ante la falta de puestos de trabajo y la buena sintonía que tenemos como colectivo, surgió la idea de hacerlo portal y mantenerlo como cooperativa”.
Virginia Quiroga: “Si bien tuvimos un proceso de desgaste porque hasta junio estuvimos negociando con la empresa, siempre tuvimos el impulso de estar unidos. Ante el incumplimiento de la empresa llegó el desconcierto de cómo seguimos. Pero también fue nuestro impulso decir: no van a hacer con nosotros lo que quieren. Es nuestro lugar. La asamblea siempre se mantuvo unida. No sé en qué momento preciso fue que decidimos por la cooperativa, pero sí sé que de repente todos estuvimos tirando para el mismo lado”.
¿Qué periodismo?
Albornoz dice que de los 52 trabajadores serán unos 30 quienes sigan trabajando sin patrón. “Algunos pudieron conseguir otro trabajo, pero ninguno estuvo en contra. Esta es una fuente de trabajo más y las puertas están abiertas también para ellos. De hecho, muchos que encontraron laburo se comprometieron a colaborar de manera externa con el portal”.
¿Cómo es el desafío de mantener un portal actualizado las 24 horas? “Nosotros pensamos que tenemos que hacer algo distinto. Si bien debemos manejar la actualización con todo lo que pase en el país y el mundo, tenemos que destacar que somos un medio autogestivo, y por eso dar lugar a otras noticias que los medios hegemónicos ignoran”.
Streger afirma que uno de los principales objetivos es afilar otra mirada periodística. “Ver qué lectura crítica podemos hacer, pensar qué tiene que decir Infonews sobre determinados temas, potenciar una mirada propia. Lo interesante del debate por la Ley de Medios es que ya nadie compra fácil un discurso periodístico, sino que todos se convirtieron un poco en semiólogos. La idea es ser un medio referente de un tipo de pensamiento de izquierda, progresista y crítico a las medidas neoliberales, y que cada vez se vaya instalando un poco más”.
El relanzamiento del portal tuvo visitas de a miles, aunque todavía pasaron pocos días para evaluar cuál fue el impacto real. “Anduvimos muy bien en visitas. Tenemos un montón para crecer e instalarnos. Una cosa que sí me sorprendió es cómo se transformó la cantidad de visitas que viene por móviles y celulares: la proporción supera al ordenador en un 55 a 45 por ciento, más sobre la noche. Acá por suerte, además, ya había una maquinaria muy aceitada, por lo que no arrancamos de cero”. Un ejemplo: sus seguidores en Twitter superan los 115 mil.
Los trabajadores también quieren incursionar en producciones audiovisuales. Quiroga: “Las banderas que vamos a levantar son las de los derechos humanos, los trabajadores, los desempleados. Esa es la identidad que queremos para nuestro Infonews. Otro desafío es terminar con los trámites legales y convertir este proyecto en algo rentable, donde podamos vivir de lo que nos gusta”.
Albornoz cuenta que se organizaron en comisiones dedicadas, por ejemplo, a contactos publicitarios y las cuestiones administrativas, pero recuerda que la autogestión es un día a día. “Es una experiencia nueva para todos nosotros. Somos periodistas y es lo que sabemos hacer. Todo lo demás es nuevo, y es a prueba y error”.
Política y estética
Los trabajadores lanzaron una campaña en su web www.infonews.com para suscripciones y socios que apuesten “por un periodismo más independiente y hecho por periodistas”. De esta manera, el medio ofrece:
- Acceso antes que el resto de los lectores a producciones e informes especiales.
- Sorteos de películas, entradas para funciones de teatro y otros regalos.
- Las sugerencias de notas e informes serán tenidas en cuenta como parte del equipo periodístico
- La colaboración económica ayudará a sostener el proyecto Infonews Cooperativa.
De las notas de política a recepcionista en un consultorio de estética. Vanesa Quiroga hizo ese trayecto: “Ahora estoy poniendo muchas energías en el portal. Un medio cooperativo no es algo simple: es ponerle el cuerpo, no sólo cumplir un horario y volver a tu casa tranquilo. Pero te lo tomás con mucho cariño y trabajás con alegría, porque ahora esto es nuestro”.
Giacometti: “Más allá del desalojo, que nos preocupa, estos tres días los viví con mucha alegría. Vemos el portal hasta distinto: los títulos nos gustan más. Lo sentimos propio”.
Streger: “Estamos entusiasmados. Estamos como cuando uno entra del banco de suplentes y sale con todo. Teníamos una cosa contenida, producto de no tener dónde publicar”.
Quiroga: “Y eso requiere mucha más fuerza. Por eso espero que la Justicia, por una vez, se ponga de nuestro lado. Después de todo lo que pasamos, una nos tiene que tocar”.
CABA
Festival ENTRÁ: Resistencia cultural contra el Decreto 345 que quedó ¡afuera! y un acto performático a 44 años del atentado a El Picadero

A 44 años del atentado en plena dictadura contra el Teatro El Picadero, ayer se juntaron en su puerta unas 200 personas para recordar ese triste episodio, pero también para recuperar el espíritu de la comunidad artística de entonces que no se dejó vencer por el desaliento. En defensa del Instituto Nacional del Teatro se organizó una lectura performática a cargo de reconocidas actrices de la escena independiente. El final fue a puro tambor con Talleres Batuka. Horas más tarde, la Cámara de Diputados dio media sanción a la derogación del Decreto 345 que desfinancia al Instituto Nacional del Teatro, entre otros organismos de la Cultura.
Por María del Carmen Varela
Fotos Lina Etchesuri para lavaca
Homenaje a la resistencia cultural de Teatro Abierto. En plena dictadura señaló una esperanza.
Esto puede leerse en la placa ubicada en la puerta del Picadero, en el mítico pasaje Discépolo, inaugurado en julio de 1980, un año antes del incendio intencional que lo dejara arrasado y solo quedara en pie parte de la fachada y una grada de cemento. “Esa madrugada del 6 de agosto prendieron fuego el teatro hasta los cimientos. Había empezado Teatro Abierto de esa manera, con fuego. No lo apagaron nunca más. El teatro que quemaron goza de buena salud, está acá”, dijo la actriz Antonia De Michelis, quien junto a la dramaturga Ana Schimelman ofició de presentadoras.


Foto: Lina M. Etchesuri para lavaca.
La primera lectura estuvo a cargo de Mersi Sevares, Gradiva Rondano y Pilar Pacheco. “Tres compañeras —contó Ana Schimelman— que son parte de ENTRÁ (Encuentro Nacional de Teatro en Resistencia Activa) un grupo que hace dos meses se empezó a juntar los domingos a la tarde, a la hora de la siesta, ante la angustia de cosas que están pasando, decidimos responder así, juntándonos, mirándonos a las caras, no mirando más pantallas”. Escuchamos en estas jóvenes voces “Decir sí” —una de las 21 obras que participó de Teatro Abierto —de la emblemática dramaturga Griselda Gambaro. Una vez terminada la primera lectura de la tarde, Ana invitó a lxs presentes a concurrir a la audiencia abierta que se realizará en el Congreso de la Nación el próximo viernes 8 a las 16. “Van a exponer un montón de artistas referentes de la cultura. Hay que estar ahí”.


Foto: Lina M. Etchesuri para lavaca.
Las actrices Andrea Nussembaum, María Inés Sancerni y el actor Mariano Sayavedra, parte del elenco de la obra “Civilización”, con dramaturgia de Mariano Saba y dirección de Lorena Vega, interpretaron una escena de la obra, que transcurre en 1792 mientras arde el teatro de la Ranchería.
Elisa Carricajo y Laura Paredes, dos de las cuatro integrantes del colectivo teatral Piel de Lava, fueron las siguientes. Ambas sumaron un fragmento de su obra “Parlamento”. Para finalizar Lorena Vega y Valeria Lois interpretaron “El acompañamiento”, de Carlos Gorostiza.

Foto: Lina M. Etchesuri para lavaca.

Foto: Lina M. Etchesuri para lavaca.
Con dramaturgia actual y de los años ´80, el encuentro reunió a varias generaciones que pusieron en práctica el ejercicio de la memoria, abrazaron al teatro y bailaron al ritmo de los tambores de Talleres Batuka. “Acá está Bety, la jubilada patotera. Si ella está defendiendo sus derechos en la calle, cómo no vamos a estar nosotrxs”, dijo la directora de Batuka señalando a Beatriz Blanco, la jubilada de 81 años que cayó de nuca al ser gaseada y empujada por un policía durante la marcha de jubiladxs en marzo de este año y a quien la ministra Bullrich acusó de “señora patotera”.
Todxs la aplaudieron y Bety se emocionó.
El pasaje Santos Discépolo fue puro festejo.
Por la lucha, por el teatro, por estar juntxs.
Continuará.

Foto: Lina M. Etchesuri para lavaca.

Foto: Lina M. Etchesuri para lavaca.


Foto: Lina M. Etchesuri para lavaca.

Foto: Lina M. Etchesuri para lavaca.
CABA
La vida de dos mujeres en la Isla de la Paternal, entre la memoria y la lucha: una obra imperdible

Una obra única que recorre el barrio de Paternal a través de postas de memoria, de lucha y en actual riesgo: del Albergue Warnes que soñó Eva Perón, quedó inconcluso y luego se utilizó como centro clandestino de detención; al Siluetazo de los 80´, los restoranes notables, los murales de Maradona y el orfanato Garrigós, del cual las protagonistas son parte. Vanesa Weinberg y Laura Nevole nos llevan de la mano por un mapa que nos hace ver el territorio cotidiano en perspectiva y con arte. Una obra que integra la programación de Paraíso Club.
María del Carmen Varela
Las vías del tren San Martín, la avenida Warnes y las bodegas, el Instituto Garrigós y el cementerio de La Chacarita delimitan una pequeña geografía urbana conocida como La Isla de la Paternal. En este lugar de casas bajas, fábricas activas, otras cerradas o devenidas en sitios culturales sucede un hecho teatral que integra a Casa Gómez —espacio dedicado al arte—con las calles del barrio en una pintoresca caminata: Atlas de un mundo imaginado, obra integrante de la programación de Paraíso Club, que ofrece un estreno cada mes.
Sus protagonistas son Ana y Emilia (Vanesa Weinberg y Laura Nevole) y sus versiones con menos edad son interpretadas por Camila Blander y Valentina Werenkraut. Las hermanas crecieron en este rincón de la ciudad; Ana permaneció allí y Emilia salió al mundo con entusiasmo por conocer otras islas más lejanas. Cuenta el programa de mano que ambas “siempre se sintieron atraídas por esos puntos desperdigados por los mapas, que no se sabe si son manchas o islas”.


La historia
A fines de los ´90, Emilia partió de esta isla sin agua alrededor para conocer otras islas: algunas paradisíacas y calurosas, otras frías y remotas. En su intercambio epistolar, iremos conociendo las aventuras de Emilia en tierras no tan firmes…
Ana responde con las anécdotas de su cotidiano y el relato involucra mucho más que la narrativa puramente barrial. Se entrecruzan la propia historia, la del barrio, la del país. En la esquina de Baunes y Paz Soldán se encuentra su “barco”, anclado en plena isla, la casa familiar donde se criaron, en la que cada hermana tomó su decisión. Una, la de quedarse, otra la de marcharse: “Quien vive en una isla desea irse y también tiene miedo de salir”.
A dos cuadras de la casa, vemos el predio donde estaba el Albergue Warnes, un edificio de diez pisos que nunca terminó de construirse, para el que Eva Perón había soñado un destino de hospítal de niñxs y cuya enorme estructura inconclusa fue hogar de cientos de familias durante décadas, hasta su demolición en marzo de 1991. Quien escribe, creció en La Isla de La Paternal y vio caer la mole de cemento durante la implosión para la que se utilizó media tonelada de explosivos. Una enorme nube de polvo hizo que el aire se volviera irrespirable por un tiempo considerable para las miles de personas que contemplábamos el monumental estallido.
Emilia recuerda que el Warnes había sido utilizado como lugar de detención y tortura y menciona el Siluetazo, la acción artística iniciada en septiembre de 1983, poco tiempo antes de que finalizara la dictadura y Raúl Alfonsín asumiera la presidencia, que consistía en pintar siluetas de tamaño natural para visibilizar los cuerpos ausentes. El Albergue Warnes formó parte de esa intervención artística exhibida en su fachada. La caminata se detiene en la placita que parece una mini-isla de tamaño irregular, sobre la avenida Warnes frente a las bodegas. La placita a la que mi madre me llevaba casi a diario durante mi infancia, sin sospechar del horror que sucedía a pocos metros.
El siguiente lugar donde recala el grupo de caminantes en una tarde de sábado soleado es el Instituto Crescencia Boado de Garrigós, en Paz Soldán al 5200, que alojaba a niñas huérfanas o con situaciones familiares problemáticas. Las hermanas Ana y Emilia recuerdan a una interna de la que se habían hecho amigas a través de las rejas. “El Garrigós”, como se lo llama en el barrio, fue mucho más que un asilo para niñas. Para muchas, fue su refugio, su hogar. En una nota periodística del portal ANRed —impresa y exhibida en Casa Gómez en el marco de esta obra— las hermanas Sosa, Mónica y Aída, cuentan el rol que el “Garri” tuvo en sus vidas. Vivían con su madre y hermanos en situación de calle hasta que alguien les pasó la información del Consejo de Minoridad y de allí fueron trasladas hasta La Paternal. Aída: “Pasar de la calle a un lugar limpio, abrigado, con comida todos los días era impensable. Por un lado, el dolor de haber sido separadas de nuestra madre, pero al mismo tiempo la felicidad de estar en un lugar donde nos sentimos protegidas desde el primer momento”. Mónica afirma: “Somos hijas del Estado” .
De ser un instituto de minoridad, el Garrigós pasó a ser un espacio de promoción de derechos para las infancias dependiente de la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia de Argentina (SENAF), pero en marzo de este año comenzó su desmantelamiento. Hubo trabajadorxs despedidxs y se sospecha que, dado el resurgimiento inmobiliario del barrio, el predio podría ser vendido al mejor postor.
El grupo continúa la caminata por un espacio libre de edificios. Pasa por la Asociación Vecinal Círculo La Paternal, donde Ana toma clases de salsa.
En la esquina de Bielsa (ex Morlote) y Paz Soldán está la farmacia donde trabajaba Ana. Las persianas bajas y los estantes despojados dan cuenta de que ahí ya no se venden remedios ni se toma la presión. Ana cuenta que post 2001 el local dejó de abrir, ya que la crisis económica provocó que varios locales de la zona se vieran obligados a cerrar sus puertas.
La Paternal, en especial La Isla, se convirtió en refugio de artistas, con una movida cultural y gastronómica creciente. Dejó de ser una zona barrial gris, barata y mal iluminada y desde hace unos años cotiza en alza en el mercado de compra-venta de inmuebles. Hay más color en el barrio, las paredes lucen murales con el rostro de Diego, siempre vistiendo la camiseta roja del Club Argentinos Juniors . Hay locales que mutaron, una pequeña fábrica ahora es cervecería, la carnicería se transformó en el restaurante de pastas Tita la Vedette, y la que era la casa que alquilaba la familia de mi compañera de escuela primaria Nancy allá por los ´80, ahora es la renovada y coqueta Casa Gómez, desde donde parte la caminata y a donde volveremos después de escuchar los relatos de Ana y Emilia.
Allí veremos cuatro edificios dibujados en tinta celeste, enmarcados y colgados sobre la pared. El Garrigós, la farmacia, el albergue Warnes y el MN Santa Inés, una antigua panadería que cerró al morir su dueño y que una década más tarde fuera alquilada y reacondicionada por la cheff Jazmín Marturet. El ahora restaurante fue reciente ganador de una estrella Michelín y agota las reservas cada fin de semana.
Lxs caminantes volvemos al lugar del que partimos y las hermanas Ana y Emilia nos dicen adiós.
Y así, quienes durante una hora caminamos juntxs, nos dispersamos, abadonamos La Isla y partimos hacia otras tierras, otros puntos geográficos donde también, como Ana y Emilia, tengamos la posibilidad de reconstruir nuestros propios mapas de vida.
Atlas de un mundo imaginado
Sábados 9 y 16 de agosto, domingos 10 y 17 de agosto. Domingo 14 de septiembre y sábado 20 de septiembre
Casa Gómez, Yeruá 4962, CABA.
Actualidad
Discapacidad: “Si la crueldad avanza, salimos a las plazas”

Se concretó este martes la marcha de personas con discapacidad y familiares, frente a quienes el gobierno hizo más de lo mismo: envió Policía y Gendarmería a amedrentarlos y amenazarlos, pese a que no estaban siquiera rompiendo el protocolo. Los gendarmes y policías tuvieron así la notable actitud de empujar y agredir a manifestantes con discapacidad que estaban reclamando pacíficamente por la motosierra aplicada a sus tratamientos, lo cual rompe toda frontera de la palabra «vulnerable».
Compartimos aquí la crónica realizada por el diario autogestivo Tiempo Argentino al respecto, reflejo de lo que está ocurriendo en el país.
Por Tiempo Argentino
Fotos: Antonio Becerra.
En protesta por el veto presidencial a la Ley de Emergencia, organizaciones de personas con discapacidad concentraron frente al Congreso, rodeado por policías y gendarmes. El reclamo se multiplicó en distintos puntos del país.
“Vallaron todo, nos rodearon de una manera exagerada. No es una movilización agresiva, nunca lo fue. No era necesaria tanta policía, tanta militarización”, criticaba Fernanda Abalde mientras emprendía la retirada de la masiva concentración frente al Congreso contra el veto de Javier Milei a la Ley de Emergencia en Discapacidad. Coordinadora de un centro de profesionales en neurodesarrollo y hermana de una persona con discapacidad a quien le recortaron las pensiones, sufre en carne propia el ajuste y el maltrato sobre el sector, que afecta tanto a prestadores como familias.
“Hay mucho maltrato del sistema a las familias, no es un sistema accesible. No solo en lo económico, es agresivo. Este año fue terrible. Hasta junio no estaban autorizados tratamientos presentados en noviembre del año pasado, por ejemplo. Siempre hubo un golpe a la discapacidad, pero este año fue muy atípico, recortaron muchos tratamientos, demoraron las autorizaciones, se planchó el nomenclador”, enumeró Abalde, coordinadora de Pulsar NeuroSocial y miembro del colectivo de Prestadores en Unidad CABA y GBA. “Es un sector con mucha demanda y se lo está desmantelando. Hay muchas familias que no pueden costear sus tratamientos”, lamentó en diálogo con Tiempo.

Represión como respuesta
La protesta había comenzado 11.30. Pasado el mediodía la concentración ya era masiva y comenzó el operativo represivo, con un número desproporcionado de efectivos de Policía Federal y Gendarmería que empujaban incluso a grupos de manifestantes entre los que había personas en silla de ruedas que gritaban contra el veto y solo portaban carteles por los derechos de las personas con discapacidad.

La Ley de Emergencia en Discapacidad busca revertir un panorama que por estos días es desolador. Según un informe reciente de la Red por los Derechos de las Personas con Discapacidad (REDI), la pensión por invalidez laboral está congelada en $217.000 y una maestra de integración en la escuela común cobra solo $3.000 la hora, con una demora de 180 días. Todo esto, mientras se recortaron pensiones por discapacidad y la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS) proyecta recortar otros cientos de miles. Se trata de pensiones de 270 mil pesos, más un bono que lleva el total a poco más de 300 mil.
“Uno va pidiendo ayuda en la familia, se hace lo que se puede. Pero esperemos que este hombre recapacite”, pidió ante las cámaras Olga, una jubilada que marchó ante el Congreso, dirigiéndose a Milei. “Hay remedios que tuve que suspender. Hay muchas cosas que tienen que cambiar en la casa para poder subsistir. Para poder seguir adelante por mi hija”, dijo a C5N.

Un reclamo federal
La masiva protesta frente al Congreso se replicó también en distintos puntos del país. “Si la crueldad avanza, salimos a las plazas”, había anunciado la Asamblea De Trabajadores de Inclusión (ATI) al convocar para este martes a una Jornada Federal por la Ley de Emergencia en Discapacidad.
Córdoba fue escenario de las protestas más concurridas. Desde la Plaza San Martín de Córdoba Capital, Virginia Els –presidenta de la Cámara de Prestadores de Discapacidad de Córdoba (Capredis)- destacó el gran número de familias que se sumó a reclamar, junto a prestadores, transportistas y profesionales. “El veto incrementó el reclamo. Ahora estamos intentando alzar la voz para que los diputados escuchen el reclamo y vuelvan a votar la ley con los dos tercios necesarios para que se sostenga. Fue algo multitudinario, con mucha más participación de familias que antes”, resaltó.

Los motivos de protesta son varios, pero todos tienen que ver con frenar el maltrato y el ajuste sobre el sector, ante una política cruel que afecta a todos los actores del circuito. “Reclamamos que se actualicen los aranceles, que se contemplen otros criterios para las auditorías. El tema de las prestaciones está en una etapa crítica: las instituciones están cerrando”, advirtió.
El embate contra el sector es tal que está generando un nivel de unidad inédito: “En Córdoba, prestadores, instituciones, profesionales independientes, familias, personas con discapacidad, estamos todos muy unidos. Estamos todos trabajando a la par. Es algo que nunca había sucedido. Nos unió el espanto”, resumió Els.
Franco Muscio, terapista ocupacional al frente de un centro de día en la zona de Sierras Chicas, se acercó a la capital provincial para participar de la protesta. “El servicio es cada vez más precario, una situación alarmante y angustiante y un Estado nacional que no da respuesta. Este año es imposible sostener las prestaciones. Cada vez hay más recortes. No sé cómo vamos a seguir. Las familias son las más perjudicadas”, sentenció ante las cámaras. “Sin espacios como los nuestros, se pierde calidad de vida. Hace diez años que estoy en esto. Nunca había pasado algo así”.

- Revista MuHace 2 semanas
Mu 205: Hay futuro
- CABAHace 1 semana
Villa Lugano: una movilización en contra del “Máster Plan”
- ActualidadHace 1 semana
Mendoza movilizada: sábado de caravanazo contra la minera San Jorge
- #NiUnaMásHace 1 semana
Femicidios en julio: la noticia es el horror
- ActualidadHace 2 semanas
Mapuches en Neuquén: 10.000 personas movilizadas contra la represión y en apoyo a las comunidades originarias